El Éxodo de los Gnomos

El exterior es un gran misterio para los miles de diminutos gnomos que viven debajo de unos grandes almacenes. Para ellos, cosas como el día, la noche, el Sol o la lluvia son sólo viejas leyendas sin fundamento. Pero una noticia desoladora sacudirá su existencia: la Tienda, su mundo, va a ser demolida. Tendrán que elaborar un increíble plan de huida que los ha de conducir a todos hacia los peligros del inmenso Exterior. De este modo empiezan a descubrir quienes son, cómo llegaron a la Tienda y adónde ha de conducirles algún día su fantástico viaje.

Reunida por primera vez en un solo volumen, El éxodo de los gnomos es una divertida trilogía dirigida a un público juvenil de la que también disfrutarán los adultos gracias a si fina ironía, sus hábiles juegos de palabras y las divertidas situaciones de estos gnomos en apuros.

El Éxodo de los Gnomos es un volumen, independiente de la colección Mundodisco, que recopila tres libros sobre estos pequeños seres: Camioneros, Cavadores y La Nave. Cabe decir que vale la pena pagar 14€ por la trilogía para poder leer de un tirón las aventuras y desventuras de los gnomos. Aún así, creo que poner las ilustraciones de las tres portadas de Josh Kirby en un blanco y negro horrible sobre un papel de mediana calidad no hace justicia. Creo que por unos cuantos euros más podrían haberlas insertado en papel satinado y en color. Pero esto ya son otros temas.... Vayamos pues al grano:

Hay dos formas de emprender la lectura de El Éxodo de los Gnomos. La primera  y más sencilla es disfrutando de las peripecias y trastadas que hacen los gnomos, de los viajes que realizan repletos de humor, de los tintes de ciencia ficción que se mezclan con la fantasía, preocupándonos tan solo de pasar un buen rato con una historia divertida y amena.

Cartel promocional película

La otra forma de embarcarnos en este viaje junto a estos seres pequeños, muy parecidos tanto morfológicamente como psiquicamente al humano, es buscar tras cada frase el doble sentido, la ironía y la critica dura pero divertida que se esconde. Una labor sencilla y que haremos casi sin darnos cuenta. Sabiendo en todo momento de lo que Terry Pratchett está hablando realmente.

Fe ciega, la intolerancia hacía lo desconocido, el egoísmo del ser humano creyéndose señor de la Tierra, son algunos de los temas que se deslizan por la historia enfundados en un humor desternillante enroscándose en unos diálogos de a tres que sólo Pratchett es capaz de dominar, que hará que te rías y utilices el cerebro a la vez (parece imposible pero no, Pratchett lo consigue).

Quizá el único pero que se le pueda sacar es el tono más juvenil con el que narra la historia, algo a lo que no estamos acostumbrados en la saga Mundodisco. Pero como no debéis dejarlo escapar tacho lo anteriormente dicho y aquí no ha pasado nada.

Por último y como curiosidad. Dreamworks tiene los derechos para hacer una película animada. De hecho estaba planeada desde hace mucho tiempo, pero por avatares de la vida se ha quedado en un cajón, a la espera de su momento; que esperamos llegue pronto.