lunes, 26 de octubre de 2015

Insurrección (La guerra de la reina araña. Libro 2)



Un grupo selecto de los aventureros drows más capacitados emprende un viaje por la traicionera Antípoda Oscura mientras los rodea el caos de la guerra. Su destino es la ciudad comercial de Ched Nasad, puerta de entrada a la poderosa Menzoberranzan. El camino los lleva a través del mismo corazón de la oscuridad, y el mundo s ubterráneo se sacude hasta sus cimientos. Porque cuando las ondas expansivas de la guerra civil atraviesen las cavernas llenas de telarañas, y el drow se vuelva contra el drow, Ched Nasad estará condenada.



Insurreción, segundo libro de la saga de La guerra de la reina araña, empieza justo donde acabó Desintegración : con un grupo de drows de diferentes castas condenados a entenderse para poder salvar su reino. El grupo viajará a un ciudad cercana para desentrañar lo que parece ser un nuevo alzamiento de seres inferiores. Podría parecer, tras leer la sinopsis, que nos encontramos con una trama muy parecida a la del primer libro y no es que sea parecida, es calcada. De esta forma y como si nos encontráramos atrapados en el tiempo (reviviendo una y otra vez el día de la marmota) volveremos a encontrarnos con los mismos personajes (esto es normal) y la misma historia (esto ya no), esta vez todos juntitos, abarrotando la historia con altas dosis de acción mágica y luchando
contra una revuelta que, aunqueprovocada por otros seres, es igual, en características, a la de la primera novela. Así pues tal vez acabe antes enumerando las, pocas, novedades. En escena entran dos personajes, un extraño demonio muy poderoso (o eso se intuye de sus palabras porque de hechos más bien pocos) y su pareja que es una sensual súcubo. Ésta última y Pharaun llegarán a tener cierto feeling haciendo que salte alguna que otra chispa entre ellos. Los personajes, algunos de ellos que llegaron a tener cierto carisma en la primera novela (como por ejemplo el mago y su compañero) aquí lo han perdido de golpe. También entran en escena los regentes de la ciudad y sus guerras internas, que tienen casi el mismo interés que ver caer hojas en otoño.
Por otro lado está la ciudad de Ched Nasad, que es el nuevo escenario en el que transcurre toda la trama, y que a pesar de que el autor se esfuerza en describirla diferente a Menzoberranzan (la ciudad del primer libro) a mi se me ha antojado un calco a ésta. La prosa una vez más es ligera y muy fácil de leer, pero como antes he dicho, y aunque me repita, leer lo mismo acaba cansando.



Insurreción es una novela repleta (saturada) de escenas de acción con una trama deshilachada que avanza de forma lenta y apenas muestra novedades. Todavía tengo cierta fe en que en el siguiente libro la historia repunte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Inserta tu opinión aquí...