jueves, 28 de abril de 2011

Blacksad

Un lugar entre las sombras: América de los años 50. Una mujer ha sido asesinada brutalmente. El jefe de la policia decide contactar con un hombre que, antes de que la chica se convirtiera en estrella, tuvo una relación con ella. Su nombre es John Blacksad y es un detective. Hasta aqui podria ser la trama de una novela negra cualquiera. Pero la diferencia radica en los personajes que campan a sus anchas por ese más que bien ambientado Estados Unidos. Todos son animales antropomórficos. Nuestro protagonista es un gato negro de morro blanco que utilizara sus dotes detectivescas  para llevar el caso a buen puerto. En este primer volumen más que la historia (que es muy buena) son los dibujos lo que llaman la atención. Se nota que Juanjo Guarnido ha dibujado para Disney porque cada viñeta parece el fotograma de una nueva pelicula de la factoria.
Interrogatorio estilo Blacksad
Artic Nation: Esta vez Blacksad debe trasladarse junto con su gabardina hasta un pueblecito de la América profunda para investigar lo que en principio sólo es un simple caso de secuestro. Allí se encontrara con un grupo de animales árticos (la versión de kukux klan animal) y racistas a más no poder que le complicaran las cosas. Por si fuera poco se topara con un reportero, Weekly que mete la nariz alli donde no le llaman.
Sin duda, es para mi el mejor de los cuatro albumes que hasta ahora se han publicado. Lo tiene todo. El dibujo impresionante de Juanjo Guarnido. El guión magistral de Juan Díaz Canales, contando al más puro estilo Philip Marlowe, el caso con más complicaciones y más giros inesperados. Y además aparece por primera vez para pegarse como una lapa al felino protagonista Weekly. El reportero que da un toque de humor a estos casos tan oscuros que acaban por resolverse pero en muchos casos sin tener un final feliz.
Weekly haciendo de las suyas








Alma roja: Blacksad esta pasando una mala época como investigador privado. Para sobrevivir se ve obligado a trabajar como guardaespaldas de un viejo amigo. Mientras tanto en Estados Unidos se ha instalado la guerra fria y el miedo al comunismo. Las cazas de brujas están a la orden del día y cuando una de estas afecta a un viejo conocido de Blacksad , éste no dudará en echarle una zarpa.
Esta historia es la que menos me ha gustado de la saga del investigador gatuno. Quizá la causa más probable sea que las intriga politicas nunca me han atraido. De todas formas no deja de ser un magnífico tandem del duo Guarnido-Díaz Canales.

El infierno, el silencio: Sebastian "littlehand" Fletcher ha desaparecido. Es un pianista único, pero tambien es un drogadicto. Weekly se topó con el caso y pensó, sin dudarlo, en su amigo felino como solución a éste. Son las calles de Nueva Orleans, en pleno carnaval, las que esta vez llevarán a nuestra pareja de sufridores héroes a descubrir que se esconde tras ese misterio en apariencia tan sencillo. Pero en las historias de Blacksad nada es lo que parece.
Impresionante este cuarto tomo. No es de extrañar que en el Expocómic 2010 se llevará varios premios.
Las calles de New Orleans estan repletas de colorido y las viñetas, más que nunca, rebosan de animales que bailan al ritmo de blues.
Como curiosida y algo que viene siendo habitual en los cómics de Blacksad es la ambigüedad con la que los autores juegan. No sólo de palabra, si no tambien en dibujo. Un camello es un camello que trapichea con cualquier tipo de dorga. Un caballo es un traficante de heroína (caballo). Las prostitutas son cerdas y zorras. Los policias son perros (mayoritariamente pastores alemanes). Y así hasta pasar por todo el reino animal.
Por último y para finalizar, recomendar el album integral, ya que por el módico precio de 29€ podras disfrutar de las cuatro historias en una recopilación a todo lujo.
  
Autores: Juan Díaz Canales / Juanjo Guarnido
Un lugar entre las sombras: 978-84-8431-245-1
Artic nation: 978- 84-8431-732-3
Alma roja: 978-84-9814-422-1 
El infierno, el silencio: 978-84-679-0301-0 
Blacksad integral (Catalán): 978-84-679-0485-7

 

miércoles, 27 de abril de 2011

Lobezno Saudade

Saudade: es una palabra de origen brasileño intraducible a otro idioma. Es una espécie de nostalgia de las cosas que habriamos podido tener la suerte de vivir.

Lobezno, el héroe más carismático y con más caracter de la patrulla x decide tomarse unos dias de relax en Brasil. Allí, debido a un percance con unos chicos que viven en la favelas, se verá involucrado en un torbellino salvaje de violencia. Los escuadrones de la muerte le perseguiran por entre la pobreza que envuelve los pueblos por el único motivo de proteger a los inocentes (una vez más). La garras de Lobezno volveran a rasgar carne y a cortar huesos hasta el efrentamiento final con un misterioso curandero con un peligroso poder.
Jean-David Morvan como guionista y Philippe Buchet como dibujante se unen para crear, quizá no un buen cómic sobre Lobezno, pero por lo menos interesante y curioso.
Logan es representado con unos rasgos que difieren de la versión americana, mucho más mediterraneo. Su cabello pierde la forma de orejas de lobo para convertirse en un peinado más moderno pero menos representativo.
Sus ropaje siguen siendo el de un motero con un toque más actual.
La historia es corta, apenas 46 páginas, pero suficiente para contarla. Aqui Lobezno hace daño de verdad, cortando con sus garras la carne de la gente que le encañona o dispara sin previo aviso y esparciendo sus trozos y la sangre por las viñetas. Es, en definitiva, un héroe más cruel que la versión americana.
Quizá no sea el mejor cómic sobre el personaje pero es una curiosidad muy recomendable.

De los autores se más bien poco, practicamente me resultan desconocidos.
De Morvan descubro que ha guionizado historias de Spirou.
Buchet debuto con Nomad. Reconozco que no me suena de nada.
Las crónicas espaciales de Sillage
Los dos se asociaron y crearon una serie galactica que tiene buena critica: Estela (en español) Sillage (versión original francesa).




Título: Lobezno Saudade

Autores: Morvan/Buchett

ISBN: 849665284X

martes, 26 de abril de 2011

Jazz Maynard

Melodía del Raval es el título del segundo álbum del anti-héroe trompetista de Barcelona. La historia continua justo donde la dejaba el primero: con Jazz y Teo metidos hasta el cuello en los asuntos turbios de un examigo de los dos: Judas Melchior. En esta parte de la historia descubrimos la profesión verdadera de Jazz, un hombre de dedos largos que no sólo los utiliza para apretar las teclas de la trompeta.

Contra viento y marea es la tercera parte de las aventuras de Jazz y la que cierra el arco argumental que comenzo en Home sweet home. Es el momento del climax de la historia y Jazz va desvelando por el camino algunas actitudes y agilidades típicas de un agente secreto, mientras reparte mamporros junto con su inseparable socio Teo. La corrupción se hace omnipresente en este número de la serie llegando a un final apoteósico en lo alto de las torres Mapfre (rebautizadas Kafre en el cómic haciéndome recordar a mortadelo y filemon) de Barcelona al estilo de las mejores peliculas de Tony Scott. Policias, antiheroes, personajes corruptos, mafiosos que quieren recuperar su lugar, todos se encontraran cara a cara. Y todos van armados.


Integral de Jazz Maynard
Sin esperanza comienza con un Jazz Maynard retirado de todos los asuntos turbios. Intenta olvidar el pasado, pasar hoja y dedicarse solamente a tocar la trompeta en el local en el que trabaja. Todo va bien hasta que alguien nuevo llega al Raval. Alguien que quiere su parte del pastel. Un hombre de "negocios" llamado Calígula y que convencera a Teo para que le haga un trabajito. Por otra parte un poderoso y adinerado caballero llegado de Nueva Inglaterra pedirá a Jazz que vuelva a las andadas y utilice su "don" para conseguirle un preciado tesoro. Mientrastanto Judas movera los hilos necesario para salir indemne de su paso por prisión. Éste es el cuarto número y abre con el un nuevo arco argumental. Es quizá el más soso de todos los que he leido de Jazz Maynard, pero es sólo una introducción a una historia muy grande. El dibujo sigue siendo increible en donde las escenas de acción están muy cuidadas. El color es muy básico con páginas enteras dominadas por unos colores primarios que otorgan el dramatismo adecuado. Si se quiere apreciar con nitidez la finura de los lápices de Roger lo mejor es hacerse con el album que reune los tres primeros de la serie en el que el blanco y negro inuda de forma agradable cada viñeta. La portada simplemente una obra de arte.
Viñeta 4: una gota de sangre cae sobre un acid o smiley...esto me suena.
Como curiosidad y para finalizar una viñeta que de una forma poco más que original hace un homenaje a uno de los cómics más grandes de la historia.



Autores: Raulé / Roger
ISBN:
         Melodía del Raval: 9788493615109 
         Contra viento y marea:9788493615192
         Sin esperanza: 9788493742256
         Jazz Maynard: Una trilogia Barcelonesa:9788415153078

lunes, 18 de abril de 2011

Crónica de un día en el 29 Salón del Cómic de Barcelona (segunda parte)

Una voz de hombre amplificada que de tanto en tanto suelta un chascarrillo nos lleva hasta Jordi Lafebre que está dando una master class. Lo hace sobre bocetos y páginas ya acabadas de su última obra publicada Lydie. La clase es amena y divertida, descubriendo los entresijos, el gran esfuerzo y trabajo que hay detrás de todo cómic. Las sillas están repletas así que no queda más remedio que verlo de pie.
De aquí a la zona del taller de graffiti. Dos graffiteros manejan con maestría los botes de pintura sobre una pared blanca creando un tipo diferente de arte.
El olor a pintura nos abandona y entramos en una parte del edificio en el que un cartel nos avisa de lo que nos vamos a encontrar a continuación.
Yo, por lo menos, estoy falto de sensibilidad, así que el cartel me parece un conjunto de letras sin sentido.
Para comenzar una bonita foto familiar.
Mirada del otro lado nos enseñan su verdadera cara. Es como cualquier familia pre navideña y post navideña.
La exposición principal de este Salón, Ni muertos ni enterrados, se abre ante nosotros. Posters de películas, fotogramas, trailers y extractos de las mejores escenas y más sangrientas de las historia de nuestros putrefactos amigos.
Portadas de los últimos cómics que tratan el tema, bocetos, y hasta la transformación de los más famosos personajes de cómic en carne andante repleta de gusanos.


A Cobi las Olimpiadas del 92 lo dejaron muerto.
Jazz Maynard ya no se lleva una trompeta a los labios, ahora prefiere un trozo de carne grasienta.
El dulce Bambi se tropieza con su propias tripas mientras canta y baila al ritmo de una canción de Disney alta en azúcares.
¿Qué hay tras esta puerta? Si alguien se ha molestado en hacer algo de bricolaje sobre ella será por algo. Mejor no desmontar la obra de arte.
En esta zona huele a zombie por todas partes y es gracias a los maquilladores que en el taller de maquillaje zombie convierten a humanos con capacidades físicas normales en despojos de carne y tripas.
Si alguien repartiera escopetas de cañón recortado ya estaría en mi salsa.
Con todas las extremidades decimos adiós a los zombies y entramos en la zona de juego Xbox. Aquí unos cuantos viciados se dejan los dedos en carne viva probando la beta del Gear of Wars 3.
Nosotros decidimos probar el Kinect. Saltamos y nos movemos cada uno por su lado como si fuéramos dos epilépticos subidos en un toro mecánico. De esto, por suerte, no hay fotos.
Toca seguir mirando tiendas y comprar algo.
Unas cuentas vueltas por allí, una visita a los lavabos, un vistazo al stand cinematográfico del Capitán Trueno y de paso unas cuantas fotos sujetando el martillo (de cartón piedra) de Thor y el escudo (de madera) del Capitán América.
Mi cabeza dice: Podemos seguir caminando y mirando cosas. Corre, el tiempo es efímero. A lo que mi estómago responde: A comer, cojones.
Compramos unas coca colas que venden al mismo precio que la gasolina en Mad Max y tirados en cualquier rincón nos disponemos a descansar y enfilar el último tramo de este Salón del Cómic de Barcelona.
Con el estómago lleno hacemos la buena obra del día participando en un consurso en el que se sortea páginas originales del dibujante de Tom y Jerry. El dinero de las participaciones se utiliza para dar una mejor vida a gatos callejeros. Pienso en Blacksad. Sí, él se lo merece.
Alef- Thau, de Alejandro Jodorowsky y Nizzoli. Me recuerda a mi infancia-adolescencia cuando leía Metal Hurlant. La nostalgia me puede y lo meto en la saca.
Lobezno Saudade una versión europea del X men con más carisma. Una rareza que me llama su atención con un precio de oferta irrisorio.
Mi pareja opta por el cómic Miss Annie. La historia de una gata muy peculiar que forma parte de la exposición Comicats, de Flore Balthazar y Frank le Gall.
TBO 4 Japan es la exposición de las obras de diferentes autores. Todas ellas serán subastadas y lo recaudado se entregará a la Cruz Roja Japonesa.

De la zona más emotiva del Salón nos dirigimos al escenario para ver el delirante monólogo zombie de Berto Romero y el cosplay zombie.

Berto Romero borda el monólogo y todas las improvisaciones que luego va metiendo en la presentación. Me quedo con una de sus frases al ver como uno de los concursantes se equivoca y baja del escenario metiéndose en su camerino: Se ha metido en mi camerino, ahora tendré que follármelo.
El cosplay muy flojito, con muy pocos disfraces que valgan la pena y con coreografías muy poco trabajadas.
Acabada la diversión en el escenario visitamos el diorama de más de cien metros cuadrados en el que soldados, tanques y material bélico a escala componen la exposición: Maquetes en acció. Panzers contra superherois.
Tras una vitrina los superhéroes y villanos.

Todo llega a su final y esta aventura repleta de viñetas no podía ser menos. Pero traspasamos las puertas del Salón del Cómic de Barcelona con un buen sabor de boca y ansiando que llegué el Salón del Manga de la Farga de Hospitalet. En general es un Then End feliz.

Pd: para una visión diferente y más femenina de este Salón visitad Chocolate Ink.

domingo, 17 de abril de 2011

Crónica de un día en el 29 Salón del Cómic de Barcelona (primera parte)

Entro al recinto en que se halla ubicado el Salón de Cómic con mi pareja de la mano y (como siempre en un sitio grande y con muchas cosas por ver) me asalta una duda:
¿Porqué Dios tiene la omnipresencia si no la utiliza? Con lo bien que me iría a mi ahora mismo. Como un humano del montón cojo la guía que entregan en la puerta y la hojeo por encima.
La primera parada es hasta el stand de Ficomic para cambiar la entrada por un cómic.
Blueberry nunca me ha gustado. Y menos desde la horrible película que se hizo para el cine. Pero menos da una piedra, así que lo guardo. El cómic que entregan a mi pareja tiene bastante mejor pinta: Los profesionales  de Carlos Gimenéz. Por suerte tanto uno como otro tienen final. Odio que regalen cómics de una saga o una serie abierta. De nuevo me repito: menos da una piedra. Ya son dos.
Desde el stan de Ficomic una enorme estatua de BlackSad llama nuestra atención. Nos encaminamos hacia ella y le hago un book fotográfico totalmente gratuito.

Comicats: miols entre vinyetes, así se llama la exposición dedicada a todo personaje del cómic que tenga rabo, orejas y maúlle (o casi).

BlackSad, Catwoman, el gato Felix, Doraemon, el compañero de Pafman del cual nunca recuerdo su nombre (pobre personaje secundario), el gato de Perich, y podría continuar hasta el fin de los tiempos (o al menos durante 5 minutos más).



Tras una gustosa sobredosis de mininos y mininas de cueros ajustados, nuestros pies nos llevan justo al otro lado, a una nueva exposición: Tarzan el rei del còmic.
Interesante la muestra de páginas originales y álbumes antiguos sobre el héroe y protector de la selva que Edgar Rice Burroughs creó.
Nuestras piernas de nuevo se ponen en funcionamiento hasta otra exposición: Historietes del 23 F.
Material dedicado al hecho en cuestión acaecido el 23 de febrero de 1981. En su mayoría son portadas y divertidas viñetas extraídas del gran semanario de humor El Jueves. Nos llama mucho la atención el sello que alguna de dichas portadas llevan estampado: la censura todavía movía algunos hilos.
Seguimos con nuestra visita. Ahora es cuando todos esos tenderetes repletos de cómics comienzan a atraerme como la miel lo hace con las abejas. Pero antes de que me zambulla en un mar de páginas repletas de historias un coche amarillo me deslumbra.

Bumblebee en su versión Camaro atrae muchísimas miradas mientras una gigantesca pantalla detrás de él pasa una y otra vez el trailer de la tercera película de Transformers. Miro en el interior: hay una luz roja e intermitente en el salpicadero. ¿Bumblebee me está hablando? ¿Quiere que le conduzca? Es sólo la alarma, y si me acerco a tocarlo seguramente las fuerzas de seguridad me disparen desde las alturas con un rifle de mira telescópica. Vale como mucho me echarían a la calle, pero así queda mucho más dramático.
Un poco de merchandising por aquí. Más cómics por allá. Y de pronto aparece una chica con más pintura encima que un cuadro de Velazquez.

Unas cuantas fotos a la habitante de Pandora y guardo la cámara. Mientras cierro la cremallera de la funda me asalta una duda:
¿ No era este Salón un especial zombies? ¿Dónde coño están? Vale, sólo llevamos media hora paseando por el recinto y aún nos queda tres cuartas partes por visitar. ¿Pero no deberíamos haber visto ya un poco de carne pútrida? O al menos un rastro de sangre...
Click aquí para ver la segunda parte.