El Instituto Tavistock

Daniel Estulin destapa ahora la existencia del Instituto Tavistock, un organismo real considerado el máximo centro mundial de control mental. Una sofisticada organización creada para controlar el destino de todo el planeta y cambiar el paradigma de la sociedad contemporánea. En este libro revolucionario, Estulin revela los orígenes y el modus operandi del Instituto, quién está detrás del mismo, cuáles son sus objetivos y cómo nos afecta a nosotros, las víctimas, en nuestra vida cotidiana. Pero también aprenderemos a combatir sus métodos.

La portada de El Instituto Tavistock es resplandeciente, brillante como un diamante, llegando a devolvernos nuestro reflejo, casi recordando a un rudimentario espejo. La luz refracta en la cubierta y nos ciega, lo vemos todo negro y poco a poco volvemos a ver la luz; es como salir de la oscuridad hacía un lugar de conocimiento. Porque es eso lo que hace Daniel Estulin, compartir el conocimiento que ha ido reuniendo con sus lectores a través de una obra amena. Algo que ya hizo con el Club Bildeberg.
El Instituto Tavistock se lee rápido, de forma agil, como cuando se repasán las noticas de un periódico por la mañana mientras se desayuna. Los ojos vuelan sobre las palabras, las frases, las páginas; devorando, pues el hambre es mucha. 
Daniel Estulin consigue que despertemos y que veamos con claridad lo que desde antaño ya sospechábamos: somos meras marionetas de una Oligarquía tiránica y, aunque romper las cadenas es tarde y casi imposible, aliviar el peso y la mella que estás hacen en nosotros es algo factible que el autor nos ayudará a conseguir.

¿Rihanna, Rockefeller,Barrio sesamo, los Masones y los Ilumminati? 

En esta novela de no ficción se reúnen un conjunto de variopintos temas y nombres de personajes famosos que, a bote pronto parecen no tener nada en común pero que una vez descubramos los nexos de unión logrará no dejarnos indiferentes. Es más, en algún momento conseguirá que nos sintamos insignificante como el más pequeño de los insectos que corren por la tierra a sabiendas de que en cualquier momento pueden ser aplastados.

En la novela  se mueve una gran cantidad de datos, sobretodo nombres de personajes. En un primer momento explican quién es quién pero a medida que avanzas vas olvidandolo rápidamente. Un glosario con todos estos personajes y una pequeña explicación no habría estado de más. 

El orden de los temas a tratar es algo que también resta enteros pues, se salta de un tema a otro en una abrir y cerrar de ojos. Unos cuantos apartados definiendo más el asunto a tratar (p.ej: música, tv, politica, etc) habrían conseguido que el lector se centrará más y que en algunos momentos no pensará que esta leyendo un mismo texto varias veces.

El Instituto Tavistock está recomendado para todos aquellos que les guste la no ficción, los que estén obsesionados con todo tipo de conspiraciones y técnicas de manipulación, los que disfrutaron buscando La Verdad del agente Mulder de Expediente X o, simplemente para aquellos que quieran despertar sin necesidad de tomar la pastilla roja.