De la mano de su profesor, dos estudiantes de psicología participan en un experimento que consiste en estudiar el expediente médico de un paciente de una clínica psiquiátrica privada de Berlín, donde hace años tuvieron lugar escenas de horror y que, actualmente, se mantiene cerrada al público.
En medio de los acontecimientos se hallan el joven Caspar, un paciente que sufre amnesia, incapaz de recordar quién es, y también un asesino en serie conocido como el Destructor de almas. Tras el ataque a tres mujeres, el Destructor de almas centrará ahora su objetivo en el centro psiquiátrico. Cualquiera puede ser la próxima víctima…
Un profesor reúne a unos alumnos y por un módico precio les propone un experimento: ellos leen el expediente de un paciente mientras el observa sus reacciones.
Hasta ahí todo parece normal, si no fuera porque el expediente está lleno de dolor, muerte y sufrimiento.
El experimento que el profesor lleva a cabo implicando a varios alumnos obliga también al lector a ser otro conejillo de indias involuntario. Ya que una de las bases de ese experimento es leer un informe sobre unos hechos acaecidos tiempo atrás en un hospital. De esta forma tan original y curiosa el lector se verá inmerso en la historia mientras, a la vez, se siente identificado con los muchachos que se prestan a tan rara labor.
En la historia planteada por el escritor Sebastian Fitzek dos tramas se irán entrelazando (los que tiene que ver con el experimento y los terribles sucesos del hospital) poco a poco hasta tejer una maquiavela tela de araña.
El experimento es un thriller de esos con asesino psicópata y grupo de personas intentando sobrevivir. Y si a eso le añadimos un hospital del que aparentemente no se puede escapar, el relato se vuelve de lo más claustrofóbico. Por añadidura, el personaje principal, un hombre de nombre Caspar, es un paciente que ha llegado recientemente al hospital con un grave problema de amnesia y con extrañas perdidas de conciencia que añaden más misterio y tensión al asunto. Y si con eso no bastaba, Sebastian Fitzek no se contentaba con un asesino al uso, así que el Destructor de Almas tiene una forma de "acabar" con sus victimas cuando menos original y retorcida. Terror psicológico asegurado.
La prosa de Sebastian Fitzek es sencilla, efectiva y terroríficamente adictiva. Consigue que te sientas atrapado pero que a la vez continúes leyendo hasta llegar a ese final repleto de sorpresas y a ese epílogo que no aporta nada que el lector ya no supiera o como mínimo intuyera.
Cabe añadir también que los lectores más acostumbrados a este tipo de género puede que vayan adivinando parte de la trama. Pero los menos acostumbrados disfrutaran hasta la última página.
Sebastian Fitzek |
El experimento de Sebastian Fitzek es una obra que se lee rápido, que arrincona al lector con su terror psicológico, pero que al final le sobra esa paja que se amontona en las últimas páginas y esa dichosa manía de explicarlo todo al dedillo. Pero aún así no ensombrece el disfrute de la lectura hasta el final.
Me apetece mucho leer esta novela, de hecho la tengo apuntada desde hace un tiempo, exactamente desde que leí la reseña de Carmen. Espero poder conseguir el libro y finalmente saciar mi curiosidad al respecto del mismo besos
ResponderEliminarMe ha llamado mucho la atención me lo apunto!
ResponderEliminarTe sigo si quieres pásate por mi blog :)
un beso