miércoles, 11 de marzo de 2015

Tuf voyaging (Los viajes de Tuf)



Haviland Tuf is an honest space-trader (one of the few), and he likes cats. So how is it that, despite being up against the worst villains in the universe, he has become the proud owner of the last working seedship, pride of Earth's Ecological Engineering Corps? We'll leave that aside for now - just be thankful that the most powerful weapon in space is in good hands, hands which now control cellular material for thousands of outlandish creatures. With his unique equipment and powerful spacecraft, Tuf is set to tackle the myriad problems that human settlers have created during their colonisation of far flung worlds. Hosts of hostile monsters, a population addicted to procreation, a dictator who is willing to unleash plagues to get his own way - and all that stands between the colonists and disaster is Tuf's ingenuity, and his reputation as an honest dealer in a universe of rogues...

¿Soy yo, o Tuf se da un aire a Varys?


Tuf voyaging (Los viajes de Tuf) nos relata las aventuras de un comerciante espacial de nombre Tuf; una especie de Han Solo pero en versión honrada, más calvo que una bola de billar, con sobrepeso y sobrado de altura como de ingenio. Ah, sí, y le encantan los gatos. En la primera de las historias (y es que el libro aúna 8 capítulos con 8 relatos muy diferenciados) Tuf se hará con una enorme nave de la que en principio no debería quedar ninguna. La nave en sí, y para abreviar, podría describirse como la versión futurista del arca de Noé. Así pues, Tuf mediante la nave, y utilizando el material genético almacenado en ella (de millones de animales y plantas de miles de diferentes planetas), podrá solucionar diferentes problemas que se encontrara en su ir y venir por el universo.



George R.R. Martin, autor más conocido por la saga de novelas de Canción de hielo y fuego, teje una historia de ciencia ficción con toques de humor irónico utilizando una prosa menos rica y enrevesada que en su saga fantástica pero igualmente funcional. El humor, esas chispas de ironía y sátira recuerdan en demasía al autor británico Terry Pratchett, máximo exponente en ese tipo de literatura, pero eso, lejos de ser algo negativo, sólo añade más diversión al conjunto. Durante las diferentes aventuras del protagonista asistiremos a más de un duelo dialéctico entre dos o varios personajes a la vez, en el que Tuf, personaje de una calma exasperante pero carismática, acostumbra a llevar la voz cantante. A pesar de los curiosos gatos que pululan por las páginas,  los extraños planetas que visita (con sus problemas pertinentes y la lógica aplastante para solucionarlos) y las extrañas especies, sobretodo animales, que Tuf es capaz de dar vida, el libro tiende en algunos momentos a la repetición; a autoplagiarse. Los giros en la trama en última instancia consiguen que esa sensación se diluya un poco.



Sin duda Los viajes de Tuf es un libro que engancha, entretiene y que además viene cargado tanto de imaginación como de sátira que obliga a reflexionar. ¿Recomendado? Por supuesto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Inserta tu opinión aquí...